El indulto a Alberto, que
no debió sorprender
Ricardo Sánchez Serra
El presidente Pedro
Pablo Kuczynski cumplió su promesa, realizada hace meses, de indultar por
razones humanitarias al exmandatario Alberto Fujimori, quien últimamente
entraba y salía de la clínica en forma corriente. “No quiero un nuevo Leguía”,
mencionaba PPK, recordando al exitoso expresidente que murió en prisión en
1932.
PPK tuvo la
valentía de hacerlo, con el costo político que le acarrea, agallas que no
tuvieron Alan García y Ollanta Humala, uno por indecisión y el otro por
convicción. La magnanimidad de PKK se engrandece, asimismo, por autorizar que
la familia Humala se reúna por Navidad, gesto que lo pinta de cuerpo entero,
ante leyes o personas sin corazón.
En las redes se
notó que el país se encuentra profundamente desunido, sin ganas de
reconciliarlo y con una diabólica sed de venganza. Esa gente no quiere al Perú,
puede más la ideología –foránea- que el amor a la Patria.
Hay que recordar lo
positivo de Alberto Fujimori: derrotó al terrorismo y la hiperinflación e hizo
la paz con Ecuador.
Ahora quieren
nuevamente tratar de vacar a PPK o ir a tribunales internacionales para que
Fujimori vuelva a la cárcel. ¿Hasta cuándo se seguirá con esa actitud
divisionista y belicista que no ayuda al progreso del país?
Los partidarios de
PPK, además de los ministros y congresistas, deben entender que el indulto es
un atributo presidencial y que no corresponde inmiscuirse en esa prerrogativa,
solo respetarla y contribuir a la unión en el Gobierno.
El indulto no debió
sorprender, se estuvo gestando durante meses. La reacción inicial del fracaso
de la vacancia y del indulto, estuvo hepática. Amigos fujimoristas se
enfermaban diciendo “traición” e incluso aseguraban que los hidalgos diez
parlamentarios serían engañados. Parecían políticos primerizos. Y los rojos no
querían ver lo que se venía.
De otro lado, ahora
es menester mantener fuerte al Gobierno y que mejoren las relaciones con el
Legislativo. PPK debe sobre pesar el gran apoyo en el tema de la vacancia de
los ministros de Defensa, Jorge Nieto y de Cultura, Salvador del Solar, quienes
en todo momento lo defendieron, frente a otros que estuvieron sumamente
flemáticos, hasta pocas horas antes de su presentación en el Congreso.
Pensemos en el
presente y en el futuro del Perú. Que el amor a la Patria nos guíe.
@sanchezserra