lunes, 22 de diciembre de 2008

Tabaré Vázquez da ejemplo a los gobernantes del mundo. Vetó proyecto de despenalización del aborto.

Publicado en la Revista AsíD´Claro, de Lima-Perú, Diciembre de 2008




http://asidclaro.com/index.php?option=com_content&task=blogsection&id=25&Itemid=55

En defensa de la vida vetó proyecto de despenalización del aborto
Tabaré Vázquez da ejemplo a los gobernantes del mundo

Por Ricardo Sánchez-Serra*

No nos cansamos de evocar las palabras de su Eminencia el Cardenal Juan Luis Cipriani, cuando en numerosas de sus homilías califica al aborto como un asesinato.

En su sermón en la Iglesia de las Nazarenas, con motivo de la salida del Señor de los Milagros, señaló que la Iglesia defiende la vida: ‘Custodia nuestro querido país para que en el Perú no haya abortos. Hay que estar siempre atentos porque esta humanidad –a veces- quiere matar a los niños no nacidos. ¡No aceptemos nunca la destrucción de la vida del niño no nacido, en ninguna de sus formas! ¡Amemos a los niños! ¡No podemos dejar que en nombre del progreso y de la planificación familiar se pretenda introducir la muerte en la sociedad peruana! Decimos ¡No al aborto, sí a la vida!.

La franqueza de Cipriani, aunque no les guste a muchos, es su principal virtud. La Iglesia jamás abdicará en los principios prístinos, en la defensa de la vida y de la familia, es decir, nunca aprobará el aborto, la píldora del día siguiente, la manipulación genética, la eutanasia o el matrimonio homosexual. Es inútil invocar falsos modernismos, las corrientes del siglo XXI, todo esto es banal.
Un gran ejemplo para los estadistas del mundo, es el veto a la despenalización del aborto, realizado por el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez.
Los abortistas creyeron que como Vázquez procedía de la izquierda, iba a dar pase a esa monstruosidad legal. Por supuesto, causó gran revuelo en Montevideo y un gran malestar en su partido, a tal punto que el mandatario renunció a su militancia y aún se desconoce el costo político.
Como paréntesis, igual está sucediendo en Luxemburgo, pero con el veto a la eutanasia. En otro ejemplo, sin par, el Rey de los Belgas, el Gran Duque Enrique vetó otro atentado contra la vida. Enrique apeló a la moral para vetar esa ley y ahora su Congreso, en represalia, adelantó que cambiará la Constitución y reducirá las prerrogativas del Gran Duque. El costo de oponerse al libertinaje y la comprobación que los políticos y esa sociedad están alejados de Dios.


Tabaré defendió la vida. “La objeción a la ley que despenaliza la interrupción del embarazo responde a razones de "orden jurídico, científico y técnico; identidad filosófica y principio éticos", indicó.
En una misiva al pueblo uruguayo, ilustró que la legislación no puede desconocer la realidad de la existencia de vida humana en su etapa de gestación, tal como de manera evidente lo revela la ciencia. La biología ha evolucionado mucho. Descubrimientos revolucionarios, como la fecundación in vitro y el ADN con la secuenciación del genoma humano, dejan en evidencia que desde el momento de la concepción hay allí una vida humana nueva, un nuevo ser. Tanto es así que en los modernos sistemas jurídicos -incluido el nuestro- el ADN se ha transformado en la "prueba reina" para determinar la identidad de las personas, independientemente de su edad, incluso en hipótesis de devastación, o sea cuando prácticamente ya no queda nada del ser humano, aun luego de mucho tiempo.

El verdadero grado de civilización de una nación –menciona- se mide por cómo se protege a los más necesitados. Por eso se debe proteger más a los más débiles. Porque el criterio no es ya el valor del sujeto en función de los afectos que suscita en los demás, o de la utilidad que presta, sino el valor que resulta de su mera existencia.

Invocó la propia Constitución y los tratados internacionales para rechazar a los abortistas. “La ley afecta el orden constitucional –que obliga a defender la maternidad- y desconoce la existencia de la vida humana a partir de la gestación…”, y colisiona con el Pacto de San José de Costa Rica y la Convención Sobre los Derechos del Niño, además que Uruguay tendría que denunciar la Convención Americana de Derechos Humanos.
Citó ejemplos para determinar que la legalización del aborto no es la salida para terminar con los abortos ilegales, y mencionó los casos de España y Estados Unidos, donde este crimen se incrementó luego de la despenalización. Y, de acuerdo a la idiosincrasia uruguaya mencionó que es más adecuado buscar una solución basada en la solidaridad que permita promocionar a la mujer y a su criatura, otorgándole la libertad de poder optar por otras vías y, de esta forma, salvar a los dos.

El proyecto abortista de marras aprobado por el Congreso uruguayo, era un adefesio legal debido a que tampoco respetaba la objeción de conciencia de los médicos que no desean practicar el aborto, ni aún a las instituciones clínicas que tampoco quieren hacerlo. Es que el aborto no es un acto médico, es un asesinato.




* Periodista. Directivo de la Asociación de Prensa Extranjera

1 comentario:

Jorge C. dijo...

El aborto siempre a sido defendido por personas irresponsables que no tienen sentido de la vida ni sentido por lo que hacen, por ello es un paso adelante lo que ha dado Tabare Vasquez, y una demostracion de valor frente al mundo.