y en GENERACCION, http://www.generaccion.com/noticia/184093/revocatoria-valores-vs-institucionalidad
Revocatoria: valores
vs institucionalidad
Ricardo Sánchez
Serra
Nadie duda que la institución de la
revocatoria es legal y fue principalmente auspiciada por políticos de izquierda.
Ahora, ¿qué debe pesar para revocar o no a la alcaldesa de Lima, Susana Villarán?
La señora Villarán provocó la animadversión
de los católicos y evangélicos, al apoyar el beso gay frente a la Catedral y
amenazar con promulgar una Ordenanza para celebrar el día gay en la ciudad. En
mi opinión las 400 mil firmas de las revocatorias fueron logradas en su gran
mayoría por los evangélicos, que son más ardorosos defensores de la fe. Sus
posturas a favor del aborto, de la abortista “píldora del día siguiente” y la
legalización de la droga ahondan la animosidad.
Por reordenar la ciudad se enfrentó a
taxistas y transportistas y el caso de La Parada, de ahí que los bolsones del D
y E estén mayoritariamente con voto fuerte en contra. (El alcalde que venga
debe continuar con estas obras aunque sea impopular). Se enfrentó a Alan García
criticando el Cristo del Pacífico y a Luis Castañeda, atacándolo por el pago a
Comunicore, eliminando sus placas de inauguración de obras y cambiando los
colores símbolos de la ciudad. El Apra y Solidaridad Nacional le están pasando
la factura. Y en lo político, los partidos, digamos conservadores, quieren su
destitución, para que la gente sepa que la izquierda no es alternativa para una
gestión edil, por su desorganización y caos.
Villarán es bien “piña”: se le sale el río,
se resquebraja un puente. Hace obras en la Costa Verde en ¡verano! Seguro que
si da un paseo por la Costa Verde hay un tsunami.
Si bien para muchos la revocatoria es un
llamado de atención para que los alcaldes trabajen y no sientan que han sido
ungidos; será un antecedente peligroso para la institucionalidad de los
municipios, porque generalmente los alcaldes –y ya me refiero en todo el país- son
elegidos con poca votación y el primer año de gestión el burgomaestre anterior
los deja con déficit y sin proyectos aumentando el descontento en la población,
por lo que ello es aprovechado por los candidatos perdedores, que juntan firmas
para revocarlo. Este “sistema”, mal concebido, provocará un espiral de revocaciones
en el país y una inútil gastadera de dinero, por lo que urgirá cambios en esta institución.
A pocos días de la elección, la suerte está
echada, difícil que el “No” revierta la tendencia y serán 300 millones de soles
los que gastará Lima para las elecciones del 17 de marzo, noviembre de 2013 y
noviembre de 2014.
¿Qué primará en el voto de cada uno?
¿Intereses privados? ¿Valores? ¿Institucionalidad? O ¿Ideología? Lo que debe
primar siempre es la defensa de los valores.
Twitter: @sanchezserra
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